El aceite de eucalipto es conocido por proporcionar un alivio inmenso para las personas que sufren de infecciones de los senos, la gripe, bronquitis, resfriado común, nariz tapada y otras enfermedades respiratorias. La mejor manera de hacerlo es aplicar unas gotas de aceite de eucalipto en un pañuelo e inhalar de vez en cuando. Otra práctica que se suele seguir es poner unas gotas de este aceite en las aguas de baño de uno.